Dormirse a las cuatro de la mañana, después de la reunión con los amigos, y que de repente a las siete de la mañana suene el celular y sea @vpablini y te invite a desayunar a las ocho de la mañana… le pides que por favor sea a las ocho y treinta para dormir un poco más, él acepta y hora y media después están rumbo a un restaurante pidiendo café filtrado y un bolón o mote pillo.

Es genial conversar y reír con alguien así, hablar de la vida, de cómo ha sido este año, de todo lo que ha pasado… volver a casa y acostarme con papá y Picco, hasta esperar que mamá vuelva del trabajo y así poder almorzar en familia, como todos los domingos.

Horas después la aventura comenzaba con Omid, Doris, Toa, Jhoe y Shamim… todos rumbo a Vilcabamba… las risas y ocurrencias no pueden faltar en este grupo, luego se nos unió Gabby, alias la tripa… que es como la cereza del pastel para un grupo de ocurridos.

Para variar hemos comido como si se viniera la época de vacas flacas…

Que bendición tan grande es contar con buenos amigos!!!